Hoy, 3 de octubre de 2010, se puede decir que termina simbólicamente la Primera Guerra Mundial (o Gran Guerra, como se la conoció en ese momento).
¿Por qué es esto? Pues bien, resulta que Alemania concluye de pagar las abusivas reparaciones de dicho conflicto, las cuales, según muchos, sembraron el camino hacia el nazismo.
En 1918, con el cese de hostilidades, no se impusieron automáticamente la mayoría de las obligaciones para los vencidos. Alemania estaba dividida entre los que querían seguir peleando y los que querían rendirse, y llena de problemas internos, sobre todo políticos. Había también muchos intereses en pugna dentro de los Aliados. En 1919, cuando se firmó el Tratado de Versalles, se impusieron condiciones humillantes a este país europeo: en primer lugar se lo responsabilizada completamente por la guerra (la cual había tenido, como siempre, varios culpables). En segundo lugar, establecía que Alemania debía pagar a sus vencedores la suma de 123 trillones de marcos (algo así como 400 trillones de dólares de ahora).
Esta cláusula, sumada a otras que destruían por completo ciertas partes de la economía nacional (como la del carbón), sumió a Alemania en largos años de hiperinflación, hambre y convulsiones políticas. A río revuelto, ganancia de pescadores: un astuto Hitler, con un programa ultranacionalista que culpaba a los Aliados de todos los problemas alemanes, consiguió suficiente apoyo popular como para subir al poder, y no dejarlo hasta su muerte.
Fue así que en 1933, al asumir como canciller, una de sus primeras medidas fue suspender los pagos de esta deuda. En 1945, terminada la siguiente guerra mundial, Alemania fue dividida, de manera que no existía un país que estuviera obligado a continuar pagando (cada Alemania era una entidad jurídica diferente en cuanto a la legislación internacional). De todas maneras, el gobierno de la Alemania Occidental accedió a continuar pagando la deuda, siempre que los dos estados volvieran a unirse. Algo que en esa época era impensable.
En 1953 los Aliados accedieron reducir la deuda a la mitad, con lo cual Alemania Occidental reanudó los pagos. Hay que tener en cuesta que estos no eran en dinero ni en oro, sino en bonos, los cuales fueron reimpresos y absorvidos varias veces durante los años. Hasta 1983 , Alemania Occidental pagó una suma cercana a los 14.000 millones de marcos.
Sin embargo, quedaba todavía pagar los intereses generados entre el final de la Segunda Guerra Mundial y el año 1952. Se acordó que esa suma se pagaría en cuotas durante los siguientes 20 años. La reunificación de las dos Alemanias supuso algunos problemas de pago, no obstante lo cual el nuevo gobierno continuó pagando las cuotas.
Aunque hace tiempo que Alemania podía pagar toda la deuda de una sola vez, en un gesto simbólico, se decidió que hoy, 3 de octubre, se pagaría la couta restante, para cumplir a rajatabla los pasados tratados. La cifra de dicha cuota asciende a 69,9 millones de euros.
1 comentario:
Es increible, como es posible que después de tanto tiempo aún se permitiese esa injusticia.
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